Fundadoras de Komvida
“En situaciones difíciles tenemos que guiarnos por nuestros valores, por lo que nos mueve, ya que cuando tienes claro tu propósito encuentras caminos para salir adelante”
Dos emprendedoras de Extremadura, Nuria y Bea, viajaron a California, lugar de nacimiento de la kombucha y, tras probarla, decidieron llevársela a España, fundaron Komvida, y hoy día la elaboran en el sur de su tierra, en Fregenal de la Sierra. Durante la pandemia apostaron por la apertura del primer local físico especializado en esta bebida. Creen firmemente en que, ante situaciones difíciles, la guía son los valores y los propósitos que los mueven.
Yo creo que la pandemia nos cogió un poco desprevenidos a todos, ya que nadie estaba preparado para una cosa así. En nuestro caso, no teníamos un plan definido que nos indicara qué hacer en esta situación. No obstante, intentamos afrontarlo de la mejor manera, aplicando el sentido común y nuestros valores, sopesando mucho las decisiones y poniendo como siempre el foco en el bienestar de nuestros clientes y cuidando de la salud de nuestros trabajadores.
Tuvimos suerte, ya que uno de nuestros canales de distribución es el canal online, por lo que muchos clientes pudieron seguir recibiendo Komvida en sus casas. Nuestra actividad fue considerada como esencial, por lo que la fábrica siguió funcionando aunque adoptamos, por supuesto, todas las medidas sanitarias en ella.
Realmente no, ya que nuestro modelo de decisiones se basa siempre en guiarnos por nuestros valores y poner el bienestar en el centro de la ecuación. Todas las decisiones que tuvimos que tomar estuvieron sustentadas en ellos.
Sí, el equipo de marketing estuvo trabajando desde casa respetando la recomendación del Gobierno. En la fábrica se mantuvo la actividad presencial por la imposibilidad de hacerlo en remoto, pero siempre garantizando la máxima seguridad a nuestros trabajadores.
La solidaridad. Cuando te encuentras en una situación como la que vivimos, te das cuenta de que las empresas tenemos la responsabilidad de arrimar el hombro y aportar nuestro granito de arena. Lo hicimos llevando Komvida a hospitales de la zona, poniéndonos en el lugar del cliente y escuchándolo siempre.
Creo que todo el mundo recuerda el 14 de marzo de 2020. No sabíamos qué iba a pasar, ni cómo íbamos a adaptarnos, ni cómo iba a evolucionar la situación. Fueron momentos de incertidumbre, como casi para cualquiera.
Cuando surgió el Estado de Alarma y nos mandaron a casa, supimos que teníamos que tomar medidas drásticas, sobre todo en ese ambiente de incertidumbre, en el qué no sabíamos qué iba a pasar.
El mayor reto yo creo que ha sido sobrevivir a una gran adversidad de una magnitud a la que nunca antes habíamos tenido que hacer frente. Somos una empresa joven. En nuestro caso, no hemos tenido que hacer ningún ERTE y hemos podido mantener a toda la plantilla en activo. Para nosotras fue un esfuerzo que tuvimos que afrontar pero que tuvimos claro que teníamos que hacer, porque iba acorde a nuestros valores.
Seguir respetando las medidas preventivas que dictan las autoridades, por supuesto, y seguir trabajando duro para que podamos llevar bienestar a cada vez más hogares. Nuestro propósito y valores siguen siendo los mismos.
Que se guíen por sus valores, siempre. Que tengan muy claro lo que les mueve y por qué hacen lo que hacen. Cuando tienes claro tu propósito, encuentras diferentes caminos para salir adelante.